Hace unos días tuvo lugar la que para muchos es la primera feria de turismo del mundo, la de Berlín (desde hace un par de años yo creo que es Fitur), y repasando notas de prensa e imágenes difundidas por varios medios de comunicación creí conveniente dar un pase de pecho al burlaco. Burlaco que, valga por esta vez la repetición se las trae. Y me explicó: en Alemania no faltó ni el apuntador, vamos, ni el del botijo aunque, eso sí, cada uno a su aire.
Buenos hoteles, dietas a tener en cuenta... Y es que la promoción tiene un precio, mayor a mi parecer en épocas de crisis. Desde luego, un mal menor cuando se trata de salir del estacamiento del sector, aunque crítico si analizamos tanto el buen hacer de las instituciones como el despilfarro de algunas políticas.
Señores, es importante unir fuerzas, consensuarlas, y sobre todo justificar cada una de las acciones. No podemos hipotecar las arcas institucionales para salir airosos de situaciones que poco o nada nos van a aportar.
Si los de a pie nos dieramos cuenta de la manipulación, si pidieramos explicaciones a nuestros políticos al finalizar su mandatos, dónde, cuánto y por qué se han gastado la pasta, otro gallo cantaría. Y mientas tanto, autónomos y pequeña empresa arrastrando deudas millonarias, financiando carreras políticas.
Persiguiendo a Gabo
Hace 10 años
totalmente deacuerdo, unos aportes:
ResponderEliminar- no existe el contrato verbal?¿ no seria de aplicación a los politicos?¿
- porque para conducir un coche te hacen un psicotecnico y para conducir una comunidad no?¿